Un Centro de Vigilancia Técnica del Tráfico Aéreo despliega la solución KVM sobre IP de Emerald para garantizar la seguridad en todo un aeropuerto

EL RETO

En situaciones críticas y peligrosas, los controladores aéreos guían a los pilotos de los aviones hacia un aterrizaje seguro. Entre bastidores, en los aeropuertos de todo el mundo, un centro de vigilancia técnica (TWC) examina todos los equipos necesarios para el control del tráfico. Como importante capa de seguridad, un TWC comprueba múltiples factores de seguridad ajenos al tráfico aéreo, por lo que va más allá de la supervisión que realizan los controladores aéreos en una torre. Un TWC es vital para evitar colisiones, gestionar y guiar el flujo de tráfico aéreo y equipos, y transmitir información al personal del aeropuerto en tierra y a bordo. Cada TWC necesita equipos precisos y fiables para apoyar a los trabajadores que velan por nuestra seguridad dentro y fuera de las instalaciones aeroportuarias.

En uno de los principales aeropuertos, un ajetreado centro de vigilancia técnica había estado utilizando una antigua instalación de matriz KVM sobre CATx. Sus unidades existentes habían llegado al final de su vida útil, por lo que el sistema necesitaba una actualización, ya que el equipo es crucial para la seguridad y fiabilidad de las operaciones diarias de los controladores aéreos.

El TWC se enfrentaba a muchos retos: La antigua solución ofrecía escasas posibilidades de gestión, las unidades eran antiguas y ya no recibían asistencia, y la sustitución de las unidades problemáticas ya no era posible. Dado que la TWC tenía previsto duplicar una solución nueva en muchos aeropuertos, la solución debía estar preparada para el futuro y consumir poco ancho de banda, con interoperabilidad total entre unidades 4K y Full HD, acceso a máquinas virtuales, un número limitado de puntos únicos de fallo y unidades sin ventilador siempre que fuera posible.

Sin duda, dado que estaban satisfechos con el historial de nuestra empresa, la TWC se dirigió a Black Box. Ya habíamos realizado algunos pequeños proyectos con este cliente y estaban satisfechos con nuestros servicios. La confianza en Black Box como fabricante y proveedor de soluciones de confianza era muy importante para el cliente.

LA SOLUCIÓN

Para reemplazar la anticuada solución de conmutación de matriz KVM sobre CATx del cliente, Black Box ofreció una solución KVM sobre IP consistente en transmisores y receptores de doble cabezal Emerald PE. Los receptores se conectan a un multivisor de cuatro cabezales con acceso USB. Los gestores KVM Boxilla^® redundantes controlan el sistema. La solución también incluía capacidad VM y 4K, reservada para uso futuro.

Black Box envió a dos ingenieros de aplicaciones in situ para acompañar al cliente durante el despliegue. Los ingenieros configuraron las unidades antes de llegar a las instalaciones del cliente para ahorrar tiempo el día de la instalación. Las soluciones se desplegaron en el Centro de Vigilancia Técnica y en el de Contingencia (copia de seguridad).

RESULTADOS

Cumpliendo todos los requisitos solicitados por el cliente, la solución es potente, fiable y fácil de gestionar. Black Box ayudó al cliente en la fase de validación previa al despliegue, que debía realizarse en un solo día. Todo se hizo para que el proceso fuera lo más eficiente posible.

En la configuración actual que agiliza los flujos de trabajo y ahorra tiempo, los operadores de TWC utilizan ahora una vista cuádruple en las pantallas y pueden solicitar el control USB cuando sea necesario a través del ratón programable. También se utiliza la conmutación. El cliente disfruta de interoperabilidad total entre unidades 4K y Full HD, funcionamiento silencioso, acceso a máquinas virtuales, protección contra puntos únicos de fallo y unidades sin ventilador siempre que es posible. En última instancia, el cliente consiguió equipar sus Centros de Vigilancia Técnica principal y de respaldo con una solución KVM sobre IP resistente, flexible y preparada para el futuro, al tiempo que duplicaba la capacidad de respaldo. Sin duda, el TWC podrá ampliarse en el futuro con 4K y VM.

Esta instalación es un primer despliegue como parte de un proyecto mayor que TWC planea duplicar en otros aeropuertos regionales, aprovechando la experiencia de confianza y el soporte de Black Box para llevar una tecnología segura, fiable, eficiente y con visión de futuro a múltiples centros de vigilancia.

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